Okami Tamashi vs Blue paper moon

arena:

El sol comenzaba a llegar a lo más alto del cielo y las sombras cada vez menguaban más mientras un pequeño gladiador se dirigía al coliseo para disputar una lucha (o mejor dicho una revancha). El pequeño gladiador se dirigía con gran velocidad al coliseo bajo el abrasador sol de ese medio día, el pequeño gladiador era Blue paper moon no obstante su rostro reflejaba seriedad y, aunque aquel día era especialmente caluroso y aunque tenía una gran afición por los helados, esta vez no llevaba consigo ningún helado lo cual era muy raro en él.

Blue paper moon quería tener una revancha contra el único que le había vencido de momento en el coliseo y había arruinado su racha de victorias. Blue paper moon lucharía contra Okami Tamashi pero esta vez el coliseo estaba creado según las preferencias del pequeño Blue paper moon en lugar de las de Okami Tamashi.

Blue paper moon avanzó muy deprisa hasta llegar a las puertas del enorme coliseo, estaba tan ansioso por tomarse su revancha que ya iba vestido con la ropa típica para combatir y la apariencia del pequeño gladiador era exactamente igual que la última vez que fue al coliseo. Niño bajo, color de pelo azul oscuro, color de ojos azul claro, viste con una camisa y unos pantolones azules y blancos; a excepción de que esta vez no llevaba ningún helado ni iba manchado.

Blue paper moon entró por la puerta sur del coliseo a la arena que estaba exactamente como Blue paper moon deseaba; Blue paper moon se encontraba frente a un laberinto de acero puro (de cinco centímetros de grosor) cuyos muros (de acero obviamente) median cinco metros con setenta y cinco centímetros. La arena de combate era una sala circular de cincuenta metros de radio (cien metros entre puerta y puerta) con el laberinto de acero en medio que dista de cada puerta quince metros en los cuales hay arena normal (dejando así que el laberinto ocupe el setenta por ciento de todo el campo de batalla). El suelo del laberinto también es de metal y debajo de este no hay nada, el laberinto se mantiene sobre la nada gracias a unos largos y gruesos tubos (de acero puro también) que están bajo todo el coliseo. El laberinto no tiene techo y deja pasar la luz del medio día.

Blue paper moon se dirigía hacia el laberinto para poder sortearlo y llegar a la otra puerta ya que era la única forma de vencer aquel combate. El laberinto era totalmente opaco por lo que Blue paper moon no sabría cuando llegaría su rival, ni Okami Tamashi sabría que Blue paper moon había entrado. Blue paper moon esta vez no usaría las mariposas ya que no solo lo había usado con Okami Tamashi y además seguramente no picaría con el mismo truco dos veces.

acciones:

info.:

De nuevo, ocurría en el Coliseo una batalla entre aquél chico, Blue Paper Moon, y yo. Quería la revancha... Seguro que esta vez me lo iba a poner difícil. Por lo que tenía entendido, esta vez sería él el que definiría el campo de batalla, y cualquier cosa me podía esperar de sus ideas locas. De nuevo, me tocaba levvantarme para intentar vencer a mi oponente... Pero tenía confianza en mí mismo. Sabía que podría hacerlo. Con una sonrisa en los labios, me encaminaba hacia el Coliseo.

Una vez pasé la recepción y llegué al vestuario, me miré en el espejo. Tenía alguna que otra legaña, así que me lavé la cara en profundidad. Tras ello, volví a mi taquilla, y comencé a vestirme para el combate. Mis botas rojas, mi máscara... Todo perfectamente colocado y puesto. Tras vestirme el chaleco, dejé mis cosas en la taquilla, y me fui por el pasillo que me conduciría hasta el recinto de la Arena. En la sala, observé cómo un gigantesco muro me esperaba a quince metros... Y nada más abrirse las puertas, eché a correr hacia él.

A la luz de los focos, mi máscara brillaba con un toque de confianza que se sumaba a mi sonrisa, mientras corría hacia el muro. La máscara que llevaba cubría mis ojos y nariz, dejando ver la boca claramente, con unos labios suaves y ligeramente notables, de un color más claro de lo normal. La máscara era recta, creando una perfecta línea horizontal de lóbulo a lóbulo de las orejas, y subía hasta llegar a la frente para taparla completamente. Era de color plateado, y en la zona de los ojos tenía sendas elipses acabadas en punta, que no eran huecas, sino que estaban cubiertas por una blanca membrana de tela que impedía ver mis ojos. Utilizaba una peluca de una melena larga, de color grisáceo. Vestía una camiseta de color negro con tribales de color rojo sangre, y un chaleco vaquero, siempre abierto. Unos pantalones pitillos de color azul oscuro, y unas botas de vaquero rojas, con las espuelas en los talones.

Así pues, la gente me observó correr, hasta que se me perdió de vista nada más entrar en el laberinto.

Información de pj:

Acciones y Jutsus:

El público del estadio comenzó a animarse de golpe, eso debía ser que el rival de Blue Paper Moon acababa de entrar en el coliseo. El laberinto de acero que Blue paper moon ordenó que estuviera presente en el campo de batalla no era muy complejo así que no resultaría muy difícil para los gladiadores sortear aquel pequeño obstáculo; además el laberinto no tenía callejones sin salida y si una bifurcación no era correcta volvía al camino del principio.

La razón por la que Blue paper moon había preferido que fuera de acero era porque así podía oír los pasos de su rival al golpear contra el suelo, sin embargo no había pensado mucho en ello porque sus pasos también se oían perfectamente cuando caminaba. Debía pensar rápido porque Okami Tamashi ya había entrado en el coliseo y seguramente en el laberinto, de momento Blue paper moon se había parado en el lugar donde se había dado cuenta de su error y ahora tenía dos opciones o bien quedarse en aquel sitio y esperar a que su rival llegase a él o bien pensar en algo mejor para poder avanzar sin ser escuchado.

Pronto se le ocurrió la idea de andar por las paredes pero cuando miró a una vio que también era de acero, parecía que Blue paper moon había caído en su propia trampa. No le quedaría más remedio que usar uno de los jutsus que había aprendido hacía poco, Blue paper moon realizó un sello con ambas manos y a sus pies apareció un pequeño torbellino que lo levantaba del suelo no más de dos centímetros. Era suficiente para no pisar el suelo. Así fue como el sigiloso Blue paper moon avanzó por el laberinto de acero en busca de su rival.

acciones:

jutsus:

gastos y daños:

*Posteando*

El escenario estaba en una completa tensión. Nadie sabía qué pasaba dentro del laberinto, y yo menos. Nada más introducirme entre las gruesas paredes metálicas, me fijé en su altura. Eran gigantescas, y de un salto no iba a poder llegar a lo más alto. No me había dado cuenta de ello hasta entonces. De lo que sí me había dado cuenta, era de que cada vez que pisaba en el suelo de acero, un característico sonido retumbaba por todo el laberinto, que lo reproducía en todos los caminos que había en él. Por ello, a los tres pasos de entrar por la apertura que me habían dejado ante mi puerta, me detuve con cara de rabia, y Blue Paper Moon dejaría de oír los sonidos de mis pisadas al detenerme. También escuché los pequeños pasos del niño que me perseguía, y cómo se detenía también. ¿Habría caído el pequeñajo en su propia trampa? Si así era, me aprovecharía de ello. Desde donde me encontraba, sabía que no me podría mover hasta encontrar a mi rival, que al parecer también había dejado de emitir sonidos. El combate se había quedado en un punto muerto, y eso a mí no me favorecía para nada... El laberinto podría tener muchos más secretos, y yo no sabía nada. El caso es que tenía que encontrarle como fuese. En cualquier momento podía aparecer por cualquier lado, y podría ser mi fin.

En ese momento, decidí practicar el jutsu que llevaba intentando realizar desde hacía unos días: el Daisan no Me o Tercer Ojo. Consistía en crear un globo ocular flotante con arena, y así podría ver todo lo que el ojo viese... Además, podría manejarlo a placer, y así cubrir todos mis puntos ciegos. Era la única salida que veía ante mi situación, con esa mole de acero laberíntica en medio del escenario, yo inmovilizado si no quería delatarme, y mi enemigo en una incógnita que no sabría hasta realizar ese jutsu. Al menos, podría apañarme alguna estrategia cuando supiera dónde se encontraba, y a partir de ahí pensar en qué hacer para no delatar mi posición. Así pues, respiré profundamente sin moverme de donde estaba, y sin respirar muy fuerte, pues ya sólo faltaba que con el eco de mi respiración fuera detectado. Concentrado, comencé a centrarme en la arena que portaba en mi calabaza. Con ella, debería crear un globo ocular perfecto, que se conectase con mi nervio óptico a través del chakra.

De esta forma, comencé a acumular mi chakra dentro de la propia calabaza de arena. Así controlaría la evolución del Daisan no Me, sin que mi rival lo viese a distancia, ya que no sabía dónde se encontraba y podría ver mi ojo para después encontrarme. Con tranquilidad, sentí cómo la arena se arremolinaba dentro de la calabaza, suavemente y con delicadeza. Poco a poco, obligué a la arena a moverse en espiral, como cuando se crea una galaxia. Las partículas giran alrededor de un epicentro, siendo absorbidas por el mismo para luego condensarse y crear la materia. Pues así realicé el movimiento. Los granos de arena comenzaron a girar entorno a un eje imaginario, que fue realizándose cuando la arena comenzó a prensarse en el punto deseado.

Lentamente, una esfera se creó en el centro de la espiral, y fue creciendo de tamaño hasta alcanzar un tamaño considerable para un globo ocular, absorbiendo partículas de arena. En ese momento, detuve la espiral, y me centré en comprimir y solidificar la esfera. Al instante, sentí que la esfera se había completado, y rápidamente la uní a mí con un fino hilo de chakra, para conectar el ojo con mi nervio óptico. (La verdad es que no sé muy bien cómo funciona el proceso, pero oye, eso se lo dejo a los ninja médicos, que para eso estudian.) Tras cerrar mi ojo derecho, y ver que, en efecto, podía observar el interior de la calabaza de arena, di por finalizado el proceso. Haciendo flotar el ojo, lo hice salir de la calabaza, y flotar hasta el borde del muro de acero.

Era una sensación extraña, pero molaba. Le hice asomarse levemente, y con lentitud, para no ser descubierto por cualquier jutsu que hiciera mi enemigo... Pero todo salió a pedir de boca. Mi enemigo no parecía tener ningún sistema para observar el campo, y eso me favorecía. Con cautela, fui elevando el ojo, hasta que conseguí divisar a mi oponente. El ojo estaba a veinte metros sobre el suelo cuando lo conseguí, y rápidamente bajó, en dirección a Blue Paper Moon. Pero no se puso sobre él o a sus lados. El ojo se situó justo encima del muro, a la derecha de Blue Paper Moon y a tres metros a su espalda, pero sin tocar el acero. de esta forma, espiaría a mi contrincante, hasta el momento preciso de atacar.

infoormación de pj:

acciones y jutsus:

gastos y daños:

técnica aprendida:

[Offrol: A partir de ahora, dime qué haces exactamente, al igual que tu posición y tu recorrido en todo momento.]

[Offrol: Esto es una venganza por amenazarme con utilizar mi turno por tardar la última vez 8D Ojo por ojo (Y porque necesito exp )]

Reglas de combate:

Turno de Blue Paper Moon:
Blue Paper Moon seguía montado en su minihuracán flotante, evitando todo sonido... Pero su oponente, Okami Tamashi, tampoco hacía ruido alguno, tras dar unos cuantos pasos, había cesado. ¿Qué estaba pasando? El pequeño Blue Paper Moon no tenía ni idea. Pero al avanzar y avanzar por el laberinto, descubrió la entrada que estaba justo delante de la puerta de Okami Tamashi. A lo mejor, había salido del laberinto, y estaba esperando al pequeño en su parte de arena. Pero Blue Paper Moon no iba a caer en su trampa. ¡Vaya que no! No se arriesgaría por una suposición que podría costarle el combate. Así que lo que hizo fue sencillo. Simplemente, se acercó con cautela al borde del muro, quedándose a un metro de la entrada, y se pegó a él, pero sin tocarlo para no hacer ruido. Blue Paper Moon esperaría a Okami Tamashi, hasta que se decidiera a entrar de nuevo en el laberinto... Y ahí acabaría el combate, con la victoria del pequeño.

acciones:

jutsus:

gastos y daños:

Turno de Okami Tamashi:
El Daisan no Me había sido perfecto. Le estaba siguiendo sin hacer ningún ruido, y parecía que mi oponente no se había percatado de su presencia. Todo estaba perfectamente controlado... Y parecía que hasta me había favorecido. Con el ojo, pude ver cómo el pequeñajo avanzava subido en su skate volador personal, y cómo avanzaba por el laberinto sin hacer el mínimo ruido. Y pronto me di cuenta de a dónde se estaba dirigiendo: hacia mi entrada al laberinto. ¿Había decidido venir a buscarme? Menudo loco... Pero me venía de perlas.

Los caminos del laberinto apenas tendrían metro y medio de ancho para caminar por ellos. Pero era suficiente para no sentir claustrofobia. En ese momento, Blue Paper Moon se encontraba casi pegado a la pared de acero que presidía la entrada de mi puerta. Y estaba concentrado, al parecer, en ver cuándo aparecería. Y pronto lo haría. Mirándole fijamente, respiré con tranquilidad, y al segundo, le di una patada a la pared donde me encontraba, lo que me daría impulso , desharía el henge, y me haría abalanzarme contra el pequeñajo, para clavarle definitivamente el Kunai que poseía en la cabeza.

El movimiento había ocurrido en apenas un segundo, lo que no le daría tiempo al pequeño de reaccionar y evitar el ataque. La cosa era bien sencilla: Tras entrar al Coliseo, había sacado el kunai que poseía, para tenerlo ya a mano en cualquier momento. Nada más entrar en el laberinto, me había dado cuenta de que mis pisadas producían un estruendoso ruido, y no iba a avanzar en esas condiciones. Lo mejor era quedarse quieto, esperando a que mi rival apareciera... Y eso había hecho. Me había hengeado en parte del muro de acero, y había esperado a que mi rival apareciese para contraatacar. Nada más acercarse mi oponente, vi las cartas sobre la mesa, y había visto la salida al combate.

Blue Paper Moon estaba desprevenido al caer en mi trampa, y no podría evitar que el kunai penetrase su cabeza rápidamente, dejándole así inconsciente. Cuando mi rival cayera al suelo, jadearía por la tensión, pero sonreiría triunfante, y levantaría la mano con el gesto del heavy metal, señalando mi victoria. Había sido un buen combate... Pero al pequeño aún le quedaba por aprender. Era bueno combatiendo, pero muy despreocupado. Pese a ello, parecía más fuerte que yo, y eso me hacía respetarle, así que, mientras llegaban los médicos, realizaría un reverencia a modo de respeto y saludo, antes de abandonar el estadio.

información del pj:

acciones y jutsus:

gastos y daños:

Blue paper moon viajó en su diminuto torbellino hasta la otra salida del laberinto, cuando llegó se quedó exactamente a un metro de dicha salida esperando a que su rival entrase en el laberinto. Blue paper moon supuso que había salido porque escuchó unos pasos en el laberinto que indicaban que su rival al menos había entrado, pero al no haberse encontrado Blue paper moon con Okami Tamashi en el recorrido del laberinto supuso que había salido.

Blue paper moon aguardaba en su pequeño remolino en la entrada cuando, de repente, un fuerte golpe en una de las paredes muy próximas a él hizo que el pequeño Blue paper moon se girase viendo a su enemigo, kunai en mano, abalanzarse sobre él. Con gran rapidez Blue paper moon hizo un sello con ambas manos creando un vendaval que daría al desprotegido Okami Tamashi.

Okami Tamashi, al estar dando un salto, no tendría posibilidad alguna de evitar el ataque que lo dejaría K.O. y le haría caer al suelo totalmente desmayado. Blue paper moon, con lo deprisa que había ocurrido todo, no sabía que había producido el fuerte ruido en la pared de acero que lo había alertado, pero ahora con la tranquilidad del combate acabado se había dado cuenta de que lo más probable había sido que Okami Tamashi había dado una patada a la pared para impulsarse.

Era una lástima, Okami Tamashi casi había logrado eludir con éxito la única trampa del laberinto. Si en lugar de haber dado una patada a la pared Okami Tamashi hubiese lanzado directamente el kunai seguramente Blue paper moon habría perdido el combate y la recompensa en Ryos de dicho combate; Blue paper moon veía un gran potencial en Okami Tamashi como ninja y seguramente que pronto convertiría ese potencial en talento.

acciones:

jutsus:

gastos y daños:

[Offrol: En ningún momento he dicho que salte. De hecho, lo que digo es que empujo a la pared para impulsarme contra ti, lo que me da más velocidad. ten en cuenta que con la poca distancia que hay, en cuanto doy la patada y me lanzo a por ti, no tardo nada en llegar, es que estás a casi nada de donde estoy. Sumando eso a que estás desprevenido, no veo factible el hecho de que me mandes un ataque... No te da tiempo a reaccionar, por la corta distancia. O ese es mi juicio. Si crees que me equivoco aún así, le preguntaré a Shark para asegurarme.]

Y así fue cómo se ganó el empate entre los dos contrincantes. Por el empuje de la onda de viento, choqué contra la pared de la que había salido, y caí al suelo estrepitosamente, inconsciente por el golpe. Había sido un combate reñido... Pero finalmente el pequeñajo había conseguido darme de lleno. Era un buen contrincante, y en cuanto ganase experiencia en combate, le retaría a la revancha. Iba a tener una larga historia de Coliseo con Blue Paper Moon, el niño del helado. Me desperté en la enfermería, cuando recuperé la consciencia. Podría sentirme mal, por haber sido vencido y tal... Pero no. Esa derrota me ayudaría a mejorar. Y se lo agradecía mucho al pequeño.

Revisado.
Sokka: + 250 Ryos. + 30 Exp. + 2 Pr.
Kazuma: + 60 Exp. + 1 Pr.