Obtención del pacto con los prototerios (inferior).

Ya era medio día cuando me hallaba vagabundeando por las calles de Amegakure no Sato y sin embargo me sentía raro, algo dentro de mí me decía que no era allí donde debía estar si no en otro lugar. De este modo decidí ponerme en marcha pero sin un rumbo fijo. Las calles estaban vacías como era habitual en esta villa. En mi camino solo me acompañaba la lluvia. Una silueta entró en mi campo de visión y de nuevo algo dentro de mi cabeza volvía a comunicarse conmigo. Una vocecilla me decía que debía seguir a aquella persona la cual ya había identificado como un hombre extraño de tamaño medio de un adulto. La razón por la que digo que era extraño era porque andaba sobre sus cuatro patas y porque llevaba una especie de máscara. Decidí seguir le allá donde quisiera ir y de esta forma comenzó un pequeño viaje por el País de la Lluvia.

La borrosa figura que había comenzado a seguir por las calles de Amegakure no Sato había salido ya de la villa y se dirigía a las llanuras de la lluvia. Si mal no recordaba allí no había nada de nada. Solo lluvia y más lluvia; por no haber no había ni árboles. La figura se detuvo sobre una roca y se sentó quedando enfrente mía. Me miró con gesto despectivo. Se desató de la espalda un gran rollo y dijo:

-Así que eres tú el siguiente ¿eh? Bueno si no hay más remedio qué se le va a hacer.-El ser habló con una voz ronca-Acércate.

No sé por qué pero le hice caso a el ser del rollo. Cuando me acerqué pude distinguir que no era humano si no un animal. Era un ornitorrinco de metro ochenta de altura de un color azul verdoso con unas cuantas arrugas por todo su cuerpo. Parecía bastante viejo. Muchas dudas se juntaban en mi cabeza como por ejemplo ¿qué sería aquel rollo que había portado en la espalda? o ¿a qué se refería con que yo era el siguiente?

-Abre este rollo y fírmalo con tu sangre.- volvió a hablar el ser.

El rollo era de color azul atado con una cinta terciopelada de color rojo. Desaté la cinta de desenrollé el gran royo de color azul. Tras haberlo abierto, mordí mi dedo índice hasta que sangró y procedí a poner mi nombre en el rollo. No sé el por qué pero sabía que debía de hacer a continuación. Me puse de pie y comencé a realizar sellos con las manos. Hice los sellos en orden, primero el sello del jabalí, seguido del sello del perro, el tercero era el sello del pájaro, continuando con el sello del mono y terminando con el sello del carnero.

Una pequeña nube de humo surgió entre el portador del rollo y yo. La nube de humo se disipó pronto y un pequeño ser apareció. Era un pequeño animalillo recién salido del huevo. Un ornitorrinco de color marrón claro con un hocico en forma de pico de pato, una cola de castor y unas patas de nutria. Medía veinte centímetros de altura y cincuenta de pico a cola. Nuestras miradas cayeron en nuestros ojos (los del pequeño ornitorrinco y los míos) y entonces lo supe:

-Mery...-susurré.

-Con que Mery ¿eh?- habló el portador del rollo. -Es un buen nombre la verdad... Bueno, pues ya nos veremos Mery y Sokka.-

Cuando quise alzar la vista para mirarle y despedirme el portador del rollo había desaparecido sin dejar rastro, allí solo quedábamos Mery y yo...

[Off: http://www.narutomundo.com/t1872-ficha-de-sokka]

Oka.