Examen de Kori.

Me despierto temprano para ir al examen. En días tan importantes prefiero tomarme las cosas con calma, o en caso contrario siempre acabo haciendo alguna cosa mal. Me meto en la ducha. Abro el grifo, y el agua sale congelada; no es de mi gusto, pero lo prefiero para poder despertarme del todo. A continuación me pongo mi vestido favorito; morado y largo hasta los pies. Soy un poco supersticiosa, y tengo fe en que, como en otras ocasiones, mi vestimenta me dará buena suerte. Desayuno y me dispongo a irme a la academia.
De camino, me encuentro a un chico. Da la impresión de que tiene el mismo destino que yo. De repente, se da la vuelta y me saluda.
-Hola, ¿qué tal? ¿Vas a hacer el examen? Bueno, primero, me llamo Kazuya, ¿y tú? -me dice con entusiasmo.

No me gusta hablar en general, y sobretodo si la persona que me da conversación no me conoce; pero este chico me da buenas vibraciones. Con un gran esfuerzo, intento tapar mi timidez y ser natural.

-Yo soy Kori; encantada. Sí, voy a hacer el examen, ¿tú también? -digo lentamente, aunque me parece que he sonado tímida y seria.

-Lo mismo digo. Tranquila, que no muerdo, no estés tan nerviosa -dice mientras se ríe-. En efecto, voy a hacer el examen. Creo que estoy bien preparado, así que estoy tranquilo. ¿Tú estás nerviosa?

-Un poco -reconozco.

-No te preocupes, tienes cara de chica lista -dice mientras me guiña un ojo.

Parece que llevamos un minuto hablando, cuando casi me doy de bruces contra la puerta de la academia, pero Kazuya me sujeta, impidiéndome que me haga daño.

-Gracias -le digo todo lo amistosamente que puedo.

-No hay de qué, mujer.

Entramos en la academia. Hay un montón de gente. Me siento en el primer sitio que encuentro, y entra el profesor. Repaso mentalmente todo lo que he estudiado y espero a que el profesor me examine.

Amanecía en la villa de Iwagakure cuando los estudiantes se dirigían a la academia shinobi de la villa, ansiosos por hacer los exámenes que les permitirían ascender al rango gennin. Muchos de ellos se habrían preparado durante días y días sin descanso, otros vendrían a probar suerte sin estudiar con antelación. Sin embargo, todos tenían un objetivo en común: ser ninjas para poder aportar algo a la villa que les había acogido con los brazos abiertos. En la academia, la tensión de aquellos shinobis que estaban nerviosos por el examen ocupaba el ambiente mientras que los estudiantes que venían preparados esperaban con impaciencia, viendo cómo aquellos que continuaban aún con la preparación iban pasando.

Algunos estudiantes eran más solitarios, llegaban al edificio sin compañía alguna y se sentaban en su sitio sin hablar con nadie mientras que otros conversaban entre ellos. También cruzaban los pasillos diversos ninjas de diferentes rangos que examinarían a los estudiantes o les prepararían para el examen. Entre ellos, caminaba un anciano Jounnin que tenía por costumbre realizar exámenes en la academia shinobi de la villa. Sus pasos eran lentos, pero recorría su camino sin cesar, apurando a los diversos rezagados que aún no habían entrado en sus respectivas aulas.

Llegó al aula que examinaría aquel día con puntualidad y se acercó a la mesa del maestro, donde dejó lo que llevaba. Se sentó en la silla y observó con disimulo los rostros de aquellos jóvenes que tendría que examinar a lo largo del día. Algunos seguían conversando sin percatarse de su presencia, mientras que otros permanecían sentados en sus sitios, esperando.

- Buenos días, hoy todos los que estáis aquí realizaréis un examen que os permitirá, o no, ascender a rango gennin -dijo a modo de presentación-. Y, como de costumbre, yo seré quien realice el examen.

Dicho esto y con la atención de los estudiantes puesta en él, levantó una de las hojas y comenzó a leer los nombres de los estudiantes que había en la sala. Había aspirantes a gennin de diversos clanes, aspectos y personalidades cuyos nombres permanecían escritos en el folio. El anciano tardó pocos segundos en elegir uno de los nombres al azar y, sin hacer esperar más a los jóvenes, lo leyó en alto.

- Kori Nara, acércate aquí, por favor.

Dicho esto, dirigió la mirada hacia los presentes, esperando la respuesta de uno de ellos.

El jounnin entra en la clase. A decir verdad, pensaba encontrarme con alguien más joven. Pero quito de mi cabeza esos pensamientos y lo observo con atención. Se sienta y llama la atención de todos con una breve presentación. Ojea la lista de estudiantes. Me distraigo mientras pienso quién será el primero. Pero de repente, una voz que dice claramente mi nombre me sobresalta de mis pensamientos. Mi corazón late con fuerza. A decir verdad, no esperaba que fuera la primera persona en ser llamada. Pero así ha sido.

-Presente -digo con voz temblorosa.

Mientras me acerco al profesor, vuelvo a repasar una vez más todo lo que he estudiado. Y pienso en todo lo que he pasado para llegar hasta aquí, todas las lágrimas derramadas... y me doy cuenta de que tengo que conseguirlo. Tengo que conseguir mi propósito, o todo habrá sido en vano.

-Estoy preparada para el examen, profesor -digo esta vez con voz firme y decidida.

El anciano paseaba la vista por los estudiantes que había en la sala cuando distinguió la temblorosa voz de una joven que, después de hablar, se levantó y comenzó a caminar en dirección a la mesa del maestro. Pasó entre las mesas de los demás estudiantes mientras algunos suspiraban aliviados y otros le deseaban suerte. Todos sabían que ser el primero a la hora de hacer cualquier tipo de prueba no solía ser agradable, pues los nervios estaban más presentes. La chica llegó a la mesa y, esta vez con la voz firme, dijo estar preparada para el examen en un tono bastante decidido.

Aquel gesto provocó una media sonrisa en el rostro del anciano, que cogió una de las hojas y, tras ojearla un poco para evitar equivocarse, se la entregó a la joven. En ella estaban las preguntas que Kori tendría que responder en la parte teórica del examen que, por suerte o por desgracia, comenzaría ella aquel día. El anciano esperó pacientemente mientras la chica observaba la hoja que, con letras claras y una buena caligrafía, guardaba las siguientes preguntas:

¿Cuáles son los tres rangos más básicos que hay dentro de toda aldea shinobi?
¿Qué elemento avanzado obtienes combinando los elementos Suiton y Raiton?
¿Qué son los Kawarimis?

- Tómate el tiempo que necesites para responder, pero intenta hacerlo lo mejor que puedas.

Eran preguntas sencillas, por lo que el anciano calculaba que la joven tardaría poco en contestar; sin embargo, le daría todo el tiempo que necesitara para responder a las preguntas que formaban la parte teórica de aquel examen. El examinador esperaría con paciencia para después proceder a la parte práctica, en la que realmente podría ver si la joven valía para ser gennin en la villa oculta de la roca.

En el ambiente podía notarse la impaciencia de los otros estudiantes que esperaban en el aula. Muchos ansiaban comenzar la prueba para acabar pronto y poder ir a casa, otros no tenían prisa por empezar, estando dispuestos a esperar el tiempo que hiciera falta. El anciano, acostumbrado a pasar días y días examinando a jóvenes estudiantes en la academia, no tenía prisa por irse, motivo por el cual daba el tiempo necesario a cada estudiante durante su examen.

Observaba con curiosidad el rostro de la joven, intentando encontrar alguna muestra de duda o algún sentimiento que le mostrara cualquier detalle sobre la preparación previa al examen. La decisión con que antes se había presentado ante él le hacía pensar que lo había preparado, pero las respuestas que diera podrían contradecir a la convicción del hombre.

El anciano me dice con voz tranquila:
- Tómate el tiempo que necesites para responder, pero intenta hacerlo lo mejor que puedas.

Leo rápidamente las preguntas, y a continuación pienso, ya más pausadamente, en las respuestas. Los conocimientos llegan rápidamente a mi mente, y no dudo al contestar.

-¿Cuáles son los tres rangos más básicos que hay dentro de toda aldea shinobi?
Genin, Chuunin y Jounin.

-¿Qué elemento avanzado obtienes combinando los elementos Suiton y Raiton?
Ranton. Se logra creando una tormenta con dichos elementos.

-¿Qué son los Kawarimis?
Los Kawarimis son una rama de Jutsus que permiten al usuario intercambiar su cuerpo por un objeto previamente preparado.

Estoy contenta con mis respuestas; pero procuro no cantar victoria antes de que me digan el resultado. Igualmente, la parte más difícil y emocionante está por llegar. ¿Cómo será? Los nervios empiezan a aflorar en mi piel con esos pensamientos, así que decido dejar de pensar en ello y concentrarme en repasar técnicas, mientras espero la respuesta del jounnin.

El anciano observó cómo la joven cogía la hoja y leía las preguntas. Poco tiempo después, contestaba a la primera pregunta con toda la seguridad que podía. Respondió también en poco tiempo a las otras dos, pero el anciano no hizo ningún comentario sobre las contestaciones que Kori había dado. Se limitó a recoger el folio, ponerlo con los demás y esperar sentado.

En ese momento, cruzó la puerta un Jounnin de menor edad, pero no demasiado joven. Cruzó el aula hasta llegar frente a la mesa del maestro y, tras observar al anciano hasta que este asintió, se dirigió a los jóvenes con calma. Su voz cubrió la sala mientras se presentaba a los jóvenes estudiantes a los que realizaría la parte práctica del examen. Después, se giró hacia Kori y habló con tranquilidad.

- Buenos días, seré yo quien te examine en la parte práctica del examen. Esta se va a basar en un pequeño combate.

Dicho esto, el examinador se dirigió al centro de la sala y observó a la joven con parsimonia, preparado para atacar en cualquier momento. Sin perder de vista a la estudiante, hizo un sello con ambas manos y todos pudieron contemplar cómo creaba una pequeña esfera chisporroteante de electricidad entre sus manos. Sin esperar mucho más, el Jounnin lanzó la esfera en dirección a Kori, que tendría que apañárselas como pudiera para esquivarla. Si tenía ingenio, eso no sería demasiado difícil, pero dependía también de las técnicas que supiera.

El ninja esperaba con paciencia para ver si Kori esquivaba el ataque, esperando también que esta contraatacara después. Al fin y al cabo, no era un combate serio, si no un examen para el ascenso a gennin.

Información:

Acciones:

Gastos y daños:

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OFF:

Te explico el tema de los combates:
Lo primero que tienes que saber es que cuando hagas algo (ya sea desvelar una estrategia, explicar cualquier acción o hacer una técnica) tienes que explicarlo con toda la claridad que puedas. Tienes que intentar que sea lo más entendible posible, te cueste las palabras que te cueste. Ten en cuenta que tú no eres la única que combate, si no que tu contrincante tendrá que saber lo que haces para poder actuar en consecuencia. Al igual que están los moderadores que revisarán el combate para poner la experiencia y demás. Y, claro está, tú misma tienes que entender lo que haces.

Lo segundo es que cuanto más largo sea el post y mejor calidad tenga en el nivel de escritura más experiencia te darán al finalizar el combate. Por eso y por el simple gusto de escribir es que será mejor que hagas posts largos. Ya sabes, si haces un post con sentimiento se hace más agradable de leer que un post cutre, corto y mal escrito. En esta parte puedes pensar como cuando lees un libro: a ti te gusta que el libro sea largo y esté bien escrito, ¿no? Pues eso, para mí leer el foro es como leer un libro: una historia escrita parte a parte.

Lo tercero es que tienes que buscar la lógica en el combate. Si haces algo que ni de lejos te parezca razonable… dentro de tus atributos, de las técnicas que sepas y demás.

Lo cuarto es que debes ceñirte a lo que sabes on rol, es decir: si tu contrincante explica que hace sellos tras la espalda, off rol lo sabes, pero tu personaje no se da cuenta, porque… ¿quién sabe si el movimiento de su brazo se debe a que le pica la espalda? En definitiva, esto lleva al “no mezcles on con off”. O información que tu oponente ha incluido en su post pero de forma que tu personaje no se dé cuenta. Como el clan, tal vez tu rival explica en su post que es de tal clan, pero tu tienes que actuar como si ignoraras esa información.

Lo quinto es explicarte el tema de los spoilers.
Normalmente, en un combate tendrás que poner tres spoilers diferentes:

El 1º spoiler es el de “Información”, en que tendrás que poner los atributos, stats y poder de jutsus de tu personaje, que podrás copiar de su ficha. Este spoiler solo tendrás que ponerlo en el primer post de cada combate, en los demás no es necesario.

El 2º spoiler es el de “Acciones”, en él tendrás que poner las técnicas que utilices durante ese turno, así como las acciones y los jutsus ocultos. Te explico un poco por encima el tema de las acciones ocultas: cuando tienes una estrategia durante el combate o quieres hacer lo que sea sin que se entere el contrincante hasta varios turnos después, puedes poner en el spoiler de acciones que tienes una acción oculta, y lo mismo pasa con los jutsus. Un ejemplo de acción oculta es hacer sellos. Es decir, si tú en el post especificas que tienes las manos tras la espalda y luego pones una acción oculta, esta puede ser hacer sellos tras la espalda. Y tu contrincante no podrá saber que estás preparando un jutsu (salvo algunas excepciones) hasta el momento en que lo realices. Con los jutsus es parecido, a diferencia de que lo que escondes es una técnica (como por ejemplo Bunshin no jutsu). Puede que tu contrincante esté atacando a una imagen ilusoria tuya, pero no lo sabrá a menos que sea mayor nivel que tú o llegado el momento en que ataque. Para eso necesitarás tener un jutsu oculto y, dependiendo de la estrategia que hayas pensado, alguno más.

El 3º spoiler es el de “Gastos y daños”, en que tendrás que hacer el recuento de tus gastos (si te atacan y aciertan tu PV bajará, si haces técnicas tu PCK también disminuirá) y de los del otro oponente (en este caso solo tendrás que explicar el daño que le haces con x ataque).

Para saber qué daño haces a tu oponente con un ataque tendrás que mirar el daño básico de… pongámonos en que has hecho una técnica de condición ofensiva. Pues tendrás que mirar en la información del jutsu el daño que hace a tu enemigo y mirar también el tipo de ataque (ninjutsu, taijutsu o genjutsu). Entonces vas al primer spoiler, el de la información y le sumas uno de esos tres. Es decir: si haces un jutsu de condición ofensiva y de tipo ninjutsu, tendrás que sumarle tu ninjutsu al daño que haga de por sí. Por ejemplo:

Si el daño básico de la técnica ofensiva de ninjutsu es 3 PV y tienes 7 en ninjutsu, lo sumas y en total harás un daño de 10 PV a tu contrincante.


Bueno, esto es lo más básico que debes saber sobre los combates… junto con lo que leas en las guías. Si tienes alguna duda no dudes en preguntar, que para algo estamos los demás. ¡Suerte! Y… ya sabes que si tienes dudas con lo que sea solo tendrás que decírmelo y te explicaré lo que haga falta, pero no soy la única que podrá ayudarte, también hay más usuarios en el foro más que capaces de explicar cómo van las cosas.

El jounnin no comenta mis respuestas. Tampoco su rostro muestra ningún signo de aprobación, ni de lo contrario. Su cara es como una máscara de indiferencia hacia mí. Me coge el folio, lo pone junto los demás y se dispone a esperar. "¿Esperar a quien?", pienso. Pero en ese momento cruza la puerta un profesor. Es menor que el anterior, con diferencia, pero tampoco es muy joven. Viene hasta llegar a la mesa del jounnin que hace unos instantes me hizo la prueba teórica, y cuando éste asiente con su cabeza, decide hablar. Como es lógico, se presenta y a continuación suelta un pequeño discurso. No presto mucha atención, pues mi cabeza está ocupada en lo que hará el maestro y en las posibles técnicas con las que podré defenderme y contraatacar. De repente noto que cambia su tono de voz, y, sobresaltada, automáticamente miro hacia él. Como había presentido, se está dirigiendo a mí. Con voz tranquila y tal vez más amistosa de la que usó antes, me dice:
-Buenos días, seré yo quien te examine en la parte práctica del examen. Esta se va a basar en un pequeño combate.

Acto seguido, se dirige al centro de la sala, lentamente pero sin perderme de vista. Mis músculos están en tensión, esperando el momento en el que me atacará. Mis sentidos están puestos en todos los movimientos que hace el profesor. Y, al fin, empieza a hacer una chisporroteante bola de electricidad, que, sin más remilgos, lanza contra mí.

Ya llevaba tiempo pensando en la posibilidad de esa técnica, así que, casi automáticamente, mis manos se disponen a hacer un sello de carnero. Entre mí y el jounnin no hay ningún objeto, y localizo una silla que está a una distancia próxima de mí, sin nadie que esté sentado en ella y nadie que me estorbe para hacer el jutsu. Y la esfera da en la silla, mientras yo estoy a salvo.

"De momento", pienso.

Pero no aguardo más en el abrigo de mi escondite, cuanto antes contraataque más eficaz será la técnica. Me encuentro a cinco metros del jounnin. Procedo entonces a hacer un sello con ambas manos, inmovilizando al maestro con mi sombra. Una vez atrapado, vuelvo a hacer un sello con mis manos, pero esta vez la sombra se divide en dos, y empieza a enroscarse alrededor de su cuerpo, mientras aprieta fuertemente.

información:

gastos y daños:

técnicas usadas:

El Jounnin, tras lanzar la bola de electricidad hacia Kori, vio cómo esta daba en una silla del aula. Sin perder el tiempo, miró a la izquierda y vio a la joven a cinco metros de distancia, seguramente preparando una ofensiva. Una media sonrisa se formó en el rostro del examinador, que ya realizaba sellos con ambas manos.

Prácticamente al instante, las sombras de la joven avanzaban hacia un lugar en que ya no había nadie, mientras que el Jounnin se acercaba a ella, colocando un kunai en su garganta. La expresión que su rostro mostraba ahora era alegre. Todos podrían comprobar cómo alejaba el arma del cuello de Kori al tiempo que una sonrisa lucía en su rostro, mostrando su satisfacción.

Avanzó hasta el frente de la estudiante y se dirigió a ella con un tono agradable en la voz.

- Tendrás que ser más rápida para poder ganarme la próxima vez.

Tras esto, se acercó a la mesa del maestro y se apoyó en ella para hablar con el anciano sobre el examen de la joven, intentando llegar a una conclusión. El anciano permanecía pensativo, con la mirada fija en Kori, de vez en cuando dirigiendo una frase a su compañero de oficio. En su rostro se presentaba una expresión agradable, revelando así que hacer exámenes no le suponía ninguna carga.

Acciones:

Gastos y daños:

Bueno, es novata, así que no le puedo pedir la panacea. Aprobada