Entrenamiento Solitario

Durante la noche mi cabeza no tenía paz, horribles pesadillas habitaban en mi mente a la hora de dormir, esa noche me desperté pasadas dos horas la medianoche, me levante de mi cama, muy somnoliento, a pesar que algo me atormentaba en mis sueños aun deseaba el poder dormir, pero esta noche sería ineficaces mis intentos por hacerlo, ya que no podía dormir, decidí salir de mi habitación y vaguear por la aldea de Kirigakure, fue en ese entonces mientras recorría sus solitarias calles donde mi mente comenzaba a razonar cada vez con mayor fuerza y velocidad, deseando un objetivo por muy pequeño que este fuera, cada vez el deseo de convertirme en un shinobi de mayor categoría se volvía más fuerte, creciendo en mí, como un sentimiento muy poderoso, tras vaguear por las calles de Kirigakure, me di cuenta que mi objetivo no lo lograría quedándome en la misma aldea todo el tiempo, tenía que salir a la naturaleza, buscar nuevos retos, desafiar al mundo con mis capacidades y superar mis limites, fue en ese entonces que me encamine hacia las puertas de la aldea y me fui alejando de ella poco a poco, buscando un poco de adrenalina en sus afueras, camine sin sentido, simplemente mirando hacia el suelo y nada más dejando que el viento que soplaba levemente, relajaba mis músculo, me llevara hacia donde estaba mi destino.

La luna iluminaba mi camino dejando detrás de mis pasos una oscuridad insondable, pero a su vez, deseando que alguien siguiera mis pasos, sin importar cuanto me gustara estar solo, siempre había deseado que alguien pudiera acompañarme en este largo camino conocido como la vida, compartiendo los momentos que mi vida tuviera y que esa persona pudiera generar… Mi viaje continuaba, no me detenía, sin importar nada, estaba determinado a completar mi objetivo de volverme más fuerte y nada me detendría en esta noche.

Atravesé una ciudad portuaria, perteneciente al territorio de Kirigakure, pero esta no llamo mi atención, sino todo lo contrario, mi viaje continuo luego de atravesarla, con el pasar del tiempo me aleje un poco y encontré un claro que se unía con el mar, era verdaderamente hermoso a la luz de la luna, fue en ese momento que me acerque hacia una de las orillas del lugar y sin pensarlo dos veces me lancé hacia las aguas de este, comenzando nadar por debajo de la superficie, disfrutaba mucho el nadar y más cuando era de noche, era como si estuviera en un lugar oscuro donde solo mis pensamientos y yo existíamos, al cabo de unos minutos el aire se comenzó a acabar, pero no quería volver a la superficie, fue en ese entonces que active el Sensuikan Kanki el cual me permitió seguir respirando debajo del agua, fue en ese momento mientras mi chakra se drenaba permitiendo respirar debajo del agua que comencé a sentir como el agua se volvía uno conmigo mismo, en ese momento me fui hasta la parte más profunda del lugar, y me senté en el suelo del fondo del lugar, la superficie se encontraba a unos cuatro o cinco metros sobre mí, me coloque en una posición de meditación entre contrayendo mis piernas hacia mi cintura y entre cruzándolas coloque mis manos con un sello simple de realizar y allí me quede.

En esa posición comencé a hacer fluir mi chakra por todo mi cuerpo, distribuyéndolo de manera equitativa, podía sentirlo, el peso y el movimiento de este, de cierto modo de una manera descontrolada, no podía controlar la velocidad la que se movía por mi cuerpo y redes de chakra, pero si podía elegir levemente hacia dónde dirigirlo, fue en ese momento que comencé a controlarlo un poco más, poco a poco se volvía como un extremidad más de mi cuerpo, sentía que podía lograr lo que quisiera con él, solo debía ejercitarlo y hacerlo crecer como cualquier otro musculo, cada segundo en el cual mantenía mi concentración al punto máximo lo movía un poco más rápido y fluido dentro de mi cuerpo, fue en ese entonces que comencé a sentir algo alrededor mío, como si fuera un abrigo que repelía todo a mi alrededor, ya no podía sentir las corrientes de agua a mi alrededor, era como si se hubieran frenado de un momento para otro, fue en ese entonces que abrí mis ojos y vi como si todo hubiera cambiado de color, el oscuro fondo del lugar ahora estaba iluminado por un lúgubre color que fluía de mí, era de un gris bastante oscuro, fue en ese momento en el cual me di cuenta que era mi aura de chakra, esta había aparecido por rebosamiento de mi chakra, había llegado a mi limite, este era tope de lo que podía hacer con mi chakra, pero que fuera el límite, no significaba que no pudiera patear ese límite para que este llegara más lejos.
En ese momento me levante del suelo con un leve envión de mi mano y comencé flotar, en el agua, el aura de chakra continuaba brillando a mi alrededor, y fue en ese instante que tome la decisión de liberar todo este chakra en un solo jutsu, para lograr comprobar lo fuerte que podía ser el jutsu en este estado, primero active mi Jutsu de hidratación y con mi mano izquierda apunte hacia el suelo con el dedo índice y mayor de mi mano, iba a usar el Mizuteppō, apunte hacia el suelo y comencé a concentrar todo este chakra en la punta de mis dedos, me tomo tan solo unos pocos segundos lograrlo y cuando me sentí listo dispare hacia el suelo.

El resultado que yo deseaba ver era cuando podía agujerear el suelo, con el susodicho jutsu, pero el tiro me salió literalmente por la culata, en vez de destruir parte del suelo salí disparado hacia arriba, elevándome hacia la superficie y cuando llegue a ella no me detuve, el disparo tuvo tanta fuerza que por lo menos me eleve unos cinco o siete metros más sobre la superficie del agua, una vez en lo más que el jutsu me llevo, todo lo que subía comenzó a bajar y el sonido que hizo mi cuerpo cuando impacto contra el agua fue tan fuerte que hasta habría sido dolorosa el tan solo escucharlo, sin chakra debajo del agua intente respirar, pero note que todos mis jutsus se habían desactivado por la falta de chakra, fue en ese entonces que comencé a nadar hacia la superficie con desesperación, llegando una vez a esta comencé a nadar lentamente hacia la orilla y al llegar solo me desplome sobre la arena, no logre evitar ya que me encontraba agotado, pero pocos minutos estando recostado en el lugar me dormí y Morfeo me llevo a su mundo de maravillas imposibles.

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