Byakko VS Espectral

Arena:

Un nuevo día comenzaba y yo ya estaba preparado para lo que iba a suceder, en el interior de la Arena Clásica se iba a desarrollar un nuevo combate, como de costumbre había decidido que el combate sería al amanecer y sin público así que tras avisar a mi rival por un mensaje urgente me adentré en los vestuarios y me preparé para el combate, me vestí con mis ropas habituales para el coliseo y tras esperar cinco minutos salí a la arena donde no había nadie, las puertas eran opacas por lo que mi enemigo no podría ver lo que ocurría dentro por muy pronto que llegase, me había tomado la molestia de pedir media hora de soledad en la arena para concienciarme para el combate y los guardias habían prometido que no dejarían pasar a nadie, ni si quiera a mi rival, hasta que fuese la hora exacta del combate.

Todos mis combates se hacían a puerta cerrada y empezaba a pensar en que no sabía por qué hacia eso, supongo que la idea de pensar en una muchedumbre mirando como me peleaba con otra persona por ganar algo de dinero y mejorar mis cualidades me resultaba ofensivo. Me coloqué en el centro de la arena en el que había restos de la corteza de los árboles que seguramente se habría desprendido ese mismo día, alrededor de estos estaban los árboles y por el cielo pude observar como un águila imperial sobrevolaba el lugar, entonces me aparté de los restos de la corteza y me acerqué a los árboles, cuando iba a rodear el primero empecé a escuchar los ruidos de los guardias preparándose así que supuse que ya estaría a punto de llegar el momento en el que el combate tuviese lugar, rodeé el árbol y tras hacerlo desaparecí ante los ojos de nadie y esperaba que mi enemigo no fuese capaz de saber donde me encontraba.

Información:

Acciones:

Una vez mas había sido convocado para luchar en la arena del coliseo de la nación de la tierra, la verdad lo agradecía, ya era hora de comenzar a moverse tras una temporada de letargo. Hice el recorrido que siempre hacía el coliseo, me introduje dentro de este y me mantuve dentro de los vestuarios durante unos cuantos minutos, pensando seriamente en que debía liberar almas de sus tormentos para mi señor, ya que tarde o temprano comenzaría a impacientarse para ver mis esfuerzos, después me arrodillé y recé unas oraciones a mi señor para que me diera fuerzas, por último me levanté y mire el pergamino que Eacos me entregó, contenía la información de dos técnicas que no conocía y eso me alegró bastante, pues eran conocimientos nuevos que llevarse a la boca.

Al fin me coloqué la máscara para tapar mi identidad real, al menos esta vez vería bien, ya que esta vez no llevaba las vendas en los ojos,así pude ver a la perfección el pasillo angosto y en unas condiciones higiénicas bastante poco cuidadas. Tras unos cuantos pasos llegué a la arena de combate, pero esta vez no oí el rugido de las masas, no parecía haber nadie, eso en parte me gustaba, esta vez no sonaba música ni parecía estar mi contrincante, pero poco me fiaba de eso, pues su puerta rejada ya estaba cerrada, al igual que se cerró la mía al entrar en la arena, así que estaba aquí, pero no era capaz de verle. Resultaba interesante que no pudiese ver a mi contrincante, pero iba preparado para ello.

Nada mas entrar y fijarme que no había contrincante me acerqué a los dos arboles mientras realizaba un sello con ambas manos y al llegar a estar a una distancia de diez metros realicé otro sello, teniendo preparada una estrategia bastante inusual en mi forma de combatir, pero no había mas remedio que luchar. Al parecer el combate iba a resultar mas que interesante, una lástima que nadie pudiera verlo, pero nada se le podía hacer a eso ya.

info:

acciones:

Escuché el ruido de la puerta de mi oponente mientras se abría y observé con tranquilidad cada uno de sus movimientos, mientras que se acercaba iba realizando sellos con sus manos y entonces se paró, mi rival se encontraba a diez metros de los árboles y entonces un ruido hizo que una bandada de pájaros saliese de los árboles, al parecer y seguramente, habían entrado allí de la mano de alguno de los limpiadores de la arena y habrían anidado en los árboles alimentándose de los frutos que poseían estos durante casi todo el año.

Entonces bajé del árbol tranquilamente y me coloqué frente a mi enemigo a unos nueve o diez metros, esperaba que él realizase las primeras acciones así que sin problema alguno saqué el kunai que guardaba en la manga y me puse en posición de batalla mientras le miraba y hablaba.

Bueno Espectral, es hora de que empiece la fiesta.

Acciones:

Al fin mi rival se dio a ver, bajando de los arboles, y con ello una bandada de pájaros salió con él, claramente esos pájaros no estaban por estar. Mi enemigo se encontraba a diez metros mas o menos de mi, sin moverse, con un kunai en las manos, parecía que esperaba que moviera pieza, así pues decidí dar comienzo al combate, pero antes no quería que nada estorbara en este, así que realicé un sello con una mano mientras con la palma de la otra apunté a los arboles, de la palma salió una calavera de fuego azul que prendió los arboles, así todo lo que hubiese en sus ramas y encima de él sufriría quemaduras, pero lo mas importante es que los dos arboles quedarían reducidos a cenizas. Así solo quedaban los pájaros y nosotros en el campo, de esa manera nada molestaría a nuestra batalla, y lo mas importante, nada impediría que liberase su alma.

Una vez realizada esta acción apunté con la palma de la mano a mi enemigo predispuesto a disparar, pero aún no lo hice, tan solo le miré serio y de dediqué unas palabras:

-Adelante, espero ansioso tu alma para liberarla, sinceramente eres el único que ha conseguido que nadie fuese a la ver un combate mio y eso me resulta interesante-Tras mis palabras comencé a recordar las enseñanzas de una de las técnicas del pergamino, una técnica katon que podía resultar muy útil para el combate, después no pude evitar soltar una sonrisa, pues seguramente la persona que tenía delante tuviese un as bajo la manga, y eso me hacía tener los cinco sentidos a todo mi alrededor, pero lo que me llamaba la atención eran esos pájaros, que revoloteaban a una distancia de diez metros de mi. Sea como fuere el combate se decidiría con el próximo movimiento.

acciones:

gastos:

Mi rival me alarmó mucho cuando tras hacer un sello con una mano y apuntar con el otro brazo a uno de los árboles y lanzó una gran llamarada con forma de calavera que impactó en uno haciendo que las llamas se extendiesen y quemasen ambos árboles, en el suelo pese a que había habido bastante fuego tras su jutsu aún se mantenían muchos de los trozos de corteza y los pájaros algo alterados por el fuego habían bajado y comenzado a sobrevolar por encima de nuestras cabezas.

Entonces empecé a correr contra mi enemigo mientras este me apuntaba con su mano, aprovechando mi velocidad enseguida me encontré a una distancia de unos cinco metros de él, le lancé el kunai, pero este no iba a su cabeza si no al lado y entonces realicé un sello con ambas manos, tras realizar este sello aparecí a la espalda de mi oponente y cogiendo el kunai que había lanzado anteriormente se lo clavé en la cabeza lo que haría que mi rival cayese inconsciente.

Acciones:

Gasto y Daño:

Al fin el combate dio comienzo. Mi enemigo comenzó a correr hacia mi y lanzó un kunais hacia mi, por lo menos eso parecía a primera vista pero ese no era su rumbo, sino ir a un lado, por lo que no me daría, sin embargo él si tenía la intención de darme, pues se acercó a mi hasta estar a una distancia de cinco metros, por desgracia para él predije ese tipo de situación y antes de que realizase otra acción los pies de este quedaron inmovilizados por unas manos esqueléticas de llamas azules, eso le causaría quemaduras. Pero no solo eso, también me dio la oportunidad de ver como actuaría, pero no creo que todos los recursos fueran esos, seguramente quedaran mas debajo de sus mangas, así pues la sonrisa no se borró de mi cara, ni tampoco mi alerta en todo lo demás, ahora la fijación era el kunai, los pájaros y algunos trozos de madera que quedaron tras quemar los arboles.

Este combate resultaba emocionante, pero entre pausa y pausa de la batalla, aprovechaba para concentrar chakra y ya de paso intentar desarrollar el jutsu del elemento katon que Eacos puso en el pergamino que me entregó, aunque no estaba muy seguro de que fuera a funcionar tenía como intención utilizarlo en el combate, pero tendría que estar muy seguro de ello o sería mi completo final. Por el momento solo realicé un sello con ambas manos, metí mis manos en las mangas de mi abrigo y esperé la próxima jugada de mi enemigo que por el momento parecía haber recibido el primer golpe.

acciones:

gastos y daños:

Ya había comenzado a correr cuando en apenas un segundo estaba a menos de cinco metros de Espectral pero en ese momento y tras haber lanzado el kunai unas manos esqueléticas tocaron mis pies quemándolos y entonces me decidí, realicé un sello con ambas manos y un par de clones aparecieron a mi lado, soltando rápido el sello los cogí a ambos y los lancé, uno iría en linea recta entre mi enemigo y yo para así evitar un ataque directo e intentando golpear a mi enemigo con una patada en la cabeza mientras el otro clon acumularía chakra en la palma de su mano y golpearía a Espectral lanzándole por los aires y haciendo que perdiese el control sobre las manos que me mantenían sujeto al suelo, tras esto el clon que golpearía a Espectral con la Palma de Viento recogería el kunai y corriendo se dirigiría al lugar en el que mi enemigo yacería para clavarle el kunai en la cabeza por si acaso aún mantenía la consciencia

Acciones:

Gasto y Daño:

Aquel luchador parecía no dejar de tener recursos, pues cada vez tenía mas ases bajo la manga, pero una vez mas sus acciones no servirían de nada. Esta vez mi rival Byakko creó dos clones, pero parecían ser sólidos, cosa que a su nivel me parecía una autentica proeza, las copias del luchador no se quedaron quietas, pues una fue directa a mi cara para asestarme una patada y la otra ha realizarme un jutsu, aunque no sabía muy bien cual, No era mala estrategia, pero el poder del inframundo iba mas lejos de lo que ningún mortal podía imaginar y hasta yo dominaba técnicas, que aunque débiles en el inframundo, aquí resultaban mas que efectivas antes de que los dos clones llegasen a mi levanté la palma de mi mano, de la que salió una bola de fuego azul que explotó a muy poca altura, esta creó una nube de ceniza del mismo color de que ardiente llama que produjo quemaduras tanto a mi verdadero rival como a los dos clones que creó, pero no solo eso, también quemó los trozos de tronco que quedaban a nuestro alrededor.

Ciertamente esta vez me había librado pero esto no sería suficiente para vencerlo, tendría que ser mas letal aún si lo que quería era vencer solo esperaba ganar y poder liberar su pobre alma inmortal encerrada en esa patética cáscara mortal, que era lo único que me interesaba en ese momento

acciones:

gastos y daños:

Mi rival era bueno, mejor que bueno, era muy bueno y parecía saber como reaccionar cada segundo, parecía que tenía un as bajo la manga para cada situación pero él no era el único que tenía esa capacidad, durante el combate había ido demostrándome poco a poco que su nombre tenía un significado y es que sus jutsus parecían provenir del mismísimo infierno, es más podría decir que Lucifer creó esas técnicas para él y casi seguramente no me equivocaría.

Mientras el kunai por fin caía al suelo a una distancia de seis metros de enemigo vi como este elevaba su mano al cielo y preparado para acabar con el combate de una maldita vez realicé un sello con ambas manos, en ese preciso momento un clon apareció a mi lado y lo lancé lejos del alcance del ataque de mi rival mientras este realizaba un sello con ambas manos y disparaba una onda de viento hacia Espectral, pude ver como una nube de ceniza en llamas, que caía, cerca de los clones y yo se empezaba a formar, realizando un nuevo sello y aprovechando que la ceniza tardaría algo en caer lancé el mismo jutsu que había lanzado el clon y que debería impactar en Espectral,una vez esta estuvo formada por completo la ceniza empezó a caer haciendo que los clones desaparicesen y que yo sufriese algunas quemaduras y un dolor bastante grave que seguramente me hubiese hecho gritar en otra ocasión.

Acciones:

Gasto y Daño:

Una vez mas mi contrincante Byakko realizó la técnica de clonación, y una vez mas pasaría en balde, pues cuando el quiso lanzar los clones de nuevo unas manos esqueléticas volvieron a aparecer, por desgracia para él de manera que volvería a quedar inmovilizado y los clones desaparecerían, una vez mas recibió quemaduras en sus tobillos y quedó inmovilizado. El combate comenzaba a decaer y a volverse monótono, algo bastante triste, así que tenía que acabar de una vez por todas. Una vez las piernas le fueron inmovilizadas saqué mi kunai, previamente preparado y se lo lancé a la cabeza, eso lo debería dejar inconsciente, pero nunca se sabe con este tipo, por si acaso realicé de nuevo un sello con ambas mano y no le quité la vista de encima por si tenía que volver a atacar de una manera diferente a la que tenía pensada.

El combate daría a su fin, o esa era la idea, mas nunca se debe subestimar a un oponente, y mas cuando resultaba demostrar que era tan capaz de plantar resistencia a un guerrero del infierno con ese nivel.

acciones:

gastos y daño:

Cuando intentaba lanzar el último de los clones mi oponente supo como atacar y realizó un jutsu que me dejó completamente paralizado, tras hacer esto lanzó su kunai con dirección a mi cabeza pero ya era tarde, estaba completamente inmovil y sería incapaz de evitar ese golpe decisivo, observé la mirada de Espectral y entonces caí inconsciente cuando el kunai me golpeó. Había sido un combate largo y entretenido hasta el final y aunque sus jutsus estaban demasiado por en cima de mi nivel había hecho todo lo que podía.

Entrenamiento:

Por lo visto conseguí derrotarlo, pero aún vivía, eso me producía enfado, pues no conseguí liberar su alma de su envoltura mortal, pero no importaba no sería en vano, pues pude recordar el otro jutsu que albergaba el pergamino, un jutsu de sellado, que permitiría almacenar armas en su cuerpo. Me acerqué al cuerpo inconsciente de mi enemigo y estando mi boca muy cerca de su oído le susurré:

-Lo siento... no he podido darte la salvación eterna, pero te obsequiaré con una técnica especial-Tras eso concentré mi chakra en la palma de la mano y la puse en su muñeca, después con la mano libre realicé un sello y fui transfiriendo chakra hasta poder abrir un espacio en su red de chakra que le permitiera guardar hasta tres objetos que no fueran muy grandes. No era mucho, pero era todo lo que pude hacer. Tras eso me levanté y dejé que los médicos se lo llevasen

técnica aprendida:

palabras:

Revisado.
Gosuto: + 300 Ryos. + 45 Exp. + 4 Pr.
Yuurei: + 35 Exp. + 2 Pr.